Calles, tianguis y hogares comienzan a llenarse de color, aromas y tradición.
Las flores de cempasúchil, el pan de muerto y los dulces típicos anuncian la llegada de una de las celebraciones más queridas por las familias poblanas.
️ “Es una fecha donde todo se llena de vida: flores, velas, pan, papel picado… pero, sobre todo, del sentimiento y el recuerdo por nuestros seres queridos”, comparte doña Pili, habitante de la región.
Así vive Serdán el Día de Muertos: entre memoria, sabor y tradición.